Cautro años de Alcalde y sigue sin conocer el reglamento de funcionamiento del Pleno y las funciones del Alcalde. Señor Vivas, el Pleno de la Corporación Municipal, que preside IPLUC, no es una reunión de amigos, ni la chupipandi que piensan ustedes, los miembros del PSOE. El Pleno es la máxima expresión de la soberanía popular y garantiza su participación ordenada de acuerdo con el reglamento de organización y funcionamiento de la Corporación, reglamento que, por cierto, fue modificado por su grupo en la anterior legislatura, precisamente, para beneficiar a su minoría.
Por este reglamento, es el alcalde el que ordena los debates y otorga los turnos de palabra, respetados escrupulosamente en este Pleno y los anteriores. Nadie les ha negado su intervención, ni les ha restringido la palabra a través de los portavoces, gestores de la opinión de los grupos políticos, a los que ustedes representan. El problema es que ustedes no querían un debate ordenado, querían intervenir todos como si se tratara de una reunión de amigos, hecho a que se ha negado el Alcalde porque esa es la función de los portavoces.
Y cuando esto se ha produción, en uso de las atribuciones que posee y de acuerdo con el reglamento, ustedes han tratado de imponer su opinión, protestando, intervinendo todos a la vez e interrumpiendo las intervenciones del Alcalde en uso de la palabra, por lo que ha sido apercibido en tres ocasiones y finalmente expulsado. A ustes, señor Vivas, ni se le ha retirado la palabra, ni se ha impedido sus intervenciones, usted ha intentado ordenar el Pleno desde la oposición e imponer su voluntad, por encima de la potestad del Alcalde y de la soberanía popular que lo colocó ahí, precisamente, para presidir la corporación y ordenar los debates.
Para concluir, desde IPLUC opinamos que sencillamente usted lo que no quiso es debatir y escuchar las réplicas del equipo de gobierno a sus escasas razones y más endebles argumentos. Ustedes no son de dialogar, ustedes son de imponer, como ya demostraron en el Pleno de la cesión del Centro Cívico , donde ante la falta de mayoría por la ausencia de un concejal provocaron la expulsión de nuestro portavoz para generar una mayoría ficticia que no fue suficiente (el resultado fue cinco votos a favor y cuatro en contra) puesto que las cesiones patrimoniales requieren de la mayoría absoluta de la corporación, no de los miembros presentes. Repase usted las intervenciones y estudie usted el reglamento en sus próximos sofocos, que queda mucha legislatura y falta le hacen.
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