Hemos de reconocer que lo esperábamos, y nos hemos salido con la nuestra. El señor Alcalde se desdice de lo dicho en el Pleno, presionado tanto por los solicitantes de la Iniciativa Popular para la adaptación del calendario de fiestas patronales, como por los que no están de acuerdo, y lo hace dos veces, obteniendo un nuevo récord de susto y de bajada de pantalones en el mismo día.
En efecto, presionado por las 271 firmas presentadas al Pleno, el Sr. Alcalde anunció una CONSULTA POPULAR DE CARÁCTER INSTITUCIONAL PARA LA ADAPTACIÓN DEL CALENDARIO DE FIESTAS PATRONALES, que dicho en plata, significaría adelantar el inicio de las fiestas patronales al 19 de enero para hacerlas coincidir con el fin de semana y siempre que no se tocara el calendario de cultos, como manifestó tanto en Pleno como en Comisión. En el mismo Pleno anunció que bajo ningún concepto, el resultado supondría aumentar los días de fiesta, establecidos desde hace unos años en 5, que se consideraban suficientes y ajustados a las necesidades del Pueblo.
Para los Independientes nada de esto era necesario, el municipio puede y debe adoptar la resolución que más convenga a sus intereses e IPLUC ya manifestó que lo que decidiera la corporación sería suficiente, ya que se debían velar por lo intereses de todos los luceneros, respetando el derecho al culto y al disfrute de las fiestas.
Pues ni una cosa, ni otra. Alertado por la polémica generada en las redes sociales, ha hecho lo que hace siempre. Alegando que ya no hay tiempo pospone la Iniciativa Popular, para "cuando sea posible", mejor nunca, y así no se indispone con nadie. Y, respecto a la duración, hace lo que dijo que no haría en el Pleno, alargar la fiesta hasta el 27, olvidándose el asunto de esos costes que alegaba para no alargar y olvidando que tal vez, estos, no puedan ser soportados por algunas economías luceneras, sobre todo jóvenes que sólo vienen el fin de semana y no están dispuestos a soportar los gastos de una semana de fiestas.
Así que, de nuevo blanco y en botella, en el vano afán de contentar a todos (y todos sabemos de donde viene la iniciativa de alargar este año las fiestas) perjudica tanto a los que proponen la Iniciativa Popular, como a los que no la quieren, castigados con sobrecostes y más gastos que no sabemos a quién benefician.
Criterio Sr. Vivas, creemos que tiene usted muy poco, y mucho menos los que le acompañan.
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